Por: Luis Tobón
En el marco de la inauguración de la nueva capilla del Hospital Universitario Erasmo Meoz, un espacio espiritual destinado a brindar consuelo y esperanza a pacientes, familiares y personal médico, el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar Laguado, hizo un anuncio clave para el futuro financiero y asistencial de la institución médica más importante del departamento.
Durante el evento, el mandatario departamental informó que desde la Gobernación se están impulsando estrategias financieras y administrativas para que, al cierre del presente año 2025, el hospital logre saldar en su totalidad las deudas acumuladas durante años. Esta meta ambiciosa cobra aún más relevancia si se tiene en cuenta que, en tan solo un año de gestión, bajo la dirección del doctor Hernando Mora, la deuda del hospital se ha reducido de 130 mil millones a cerca de 60 mil millones de pesos.
“En apenas un año, la gerencia del doctor Hernando Mora ha logrado bajar casi a la mitad una deuda histórica que por años puso en riesgo la operación del hospital. Gracias a su compromiso, visión gerencial y fe, estamos más cerca de tener un hospital financieramente sano”, afirmó Villamizar.
También destacó que la designación del doctor Mora,como gerente del Erasmo Meoz, fue una de las decisiones más acertadas de su administración;recordando los logros anteriores del profesional en la recuperación del Hospital San Juan de Dios de Pamplona, institución que también estuvo al borde de la liquidación y que hoy es un ejemplo de gestión.
“El mayor aporte que le hemos hecho al hospital ha sido, sin duda, haber designado a Hernando Mora como gerente. Su trayectoria y resultados hablan por sí solos, y su fe en Dios ha sido una guía en cada paso. Él se encomendó a Dios para sacar adelante el Erasmo Meoz, y los frutos ya se ven”, agregó el mandatario departamental.
La grave deuda del Hospital Universitario Erasmo Meoz se acumuló durante años por múltiples factores, entre ellos el incumplimiento en el pago de servicios por parte de varias EPS, la atención a pacientes migrantes sin compensación oportuna por parte del Gobierno Nacional y la alta demanda de atención especializada sin los recursos necesarios para su sostenibilidad. Esta situación puso en jaque la estabilidad de la institución y limitó su capacidad de inversión en infraestructura, personal y equipos médicos.